Diversos inconvenientes pueden interrumpir tu serenidad y confort en el hogar. Surgen inesperadamente, en instantes menos oportunos, y originan no pocos dolores de cabeza. Un embotellamiento en las cañerías es uno de los contratiempos más habituales.

En el momento en que esto acontece, antes de apresurarte a contactar a un profesional en fontanería, tienes la opción de intentar remediar la situación por tus propios medios. Si te sientes inseguro acerca de la manera de liberar una tubería atascada, estás de enhorabuena porque en este artículo te facilitaremos las pautas necesarias para que sepas cómo proceder.

Consultas habituales sobre la liberación de tuberías extremadamente obstruidas

¿Qué ácido resulta óptimo para liberar obstrucciones en las tuberías? Utilizar ácido para solucionar un atasco importante en las tuberías no es recomendable, pues su naturaleza corrosiva puede acarrear daños considerables en la estructura de las mismas, lo que podría derivar en daños más severos. Sin embargo, en el comercio existen diversas soluciones químicas desobstructivas que podrían resultar adecuadas.

¿Cuál es el método para desobstruir un lavaplatos que parece no absorber? Como medida inicial, emplea alguna herramienta especializada, tal como una ventosa desatascadora o un resorte desobstructivo. De no lograr resultados con el uso de estas herramientas, existe la posibilidad de recurrir a la combinación de vinagre con bicarbonato o optar por un agente químico desatascador.

¿Cómo liberar una tubería con métodos caseros? Procede vertiendo en el drenaje, siguiendo esta secuencia: bicarbonato, seguido de vinagre y terminando con agua en ebullición. Permite que la mezcla surta efecto durante aproximadamente diez minutos, y finaliza enjuagando con agua de temperatura elevada.

3 métodos para liberar tuberías altamente obstruidas

Liberar una cañería profundamente taponada puede ser una tarea colosal para aquellos que carecen del equipo y la sapiencia apropiados. Evitar los bloqueos es, posiblemente, la intervención más efectiva; sin embargo, cuando el sistema de drenaje comienza a fallar, es crucial considerar medidas contundentes.

Los primeros indicios de obstrucciones en las tuberías abarcan un aroma desagradable, que de ningún modo se debe ocultar con desodorantes ya que estos olores son consecuencia de la acumulación de jabones, productos de limpieza, grasas y desechos orgánicos en las columnas de desagüe, que con el tiempo se convierten en criaderos de microorganismos y hongos; ruidos inusuales, tales como gorgoteos, que alertan sobre comienzos de embotellamientos en ciertos tramos del conducto, y la irrupción de plagas tales como moscas, cucarachas y otros insectos emergiendo de las corrientes de desecho, aprovechando las obstrucciones que impiden el flujo normal de la evacuación de líquidos y desperdicios del hogar.

¿Qué técnicas son más efectivas para liberar tuberías altamente obstruidas?

En primera instancia, ciertos agentes químicos pueden intervenir en la degradación de aglomerados de desechos y lípidos que causan obstrucciones en las tuberías, logrando su completa disolución. Estas sustancias, que son el ingrediente principal de los productos químicos para desatascar, son altamente recomendadas por expertos en mantenimiento de drenajes debido a su potente acción frente a obstrucciones tenaces.

Igualmente, esta alternativa no presenta un conflicto con la conservación ambiental, ya que, en su mayor parte, los bloqueos están formados por residuos de productos de limpieza y otros componentes adversos para la naturaleza. Para contrarrestarlos, los productos químicos para desatascar frecuentemente incorporan compuestos que pueden degradarse biológicamente, lo cual representa una huella ecológica reducida. Por lo tanto, constituyen una solución efectiva a la incógnita sobre cómo eliminar conglomerados de jabón en las tuberías.

Es importante recalcar la necesidad de manejar estos productos con cuidado, ateniéndose estrictamente a las instrucciones proporcionadas por los fabricantes y evitando combinarlos con otras substancias como hidróxido de sodio o bicarbonato de sodio que hayan sido aplicados previamente en la tubería como solución temporal. Las respuestas encontradas en manuales hazlo tú mismo muchas veces acarrean más dificultades de las que resuelven, incluyendo el uso de fermentos, ácido acético y otros agentes químicos, por mencionar algunos; solamente, el uso de agua a punto de ebullición ha demostrado ser un método confiable y sin riesgos para aliviar la congestión de las tuberías.

En segundo término, otro método para liberar un desagüe central implica el uso directo de utensilios manuales. Frecuentemente, las acumulaciones de residuos que causan estos problemas no pueden ser disueltas efectivamente con productos químicos, siendo necesaria una acción mecánica directa, o sea, el acceso y la extracción inmediata del material causante del tapón.

De acuerdo con esto, uno de los implementos más frecuentes para resolver atascos en lavaplatos y lavamanos son los artilugios que cuentan con una copa de succión. Estos se componen de un asidero y un extremo para succionar que permite remover las capas de mugre acumuladas en las tuberías. De manera paralela, el desatascador a presión es otra herramienta esencial para zanjar problemas de atascos a través del uso de la presión del aire y la succión. Ambos se utilizan directamente sobre la salida del agua, evitando así tener que desmontar las tuberías hasta dar con el punto afectado.

Por otro lado, el cable desatascador se destaca como el socorrista ideal para enfrentar bloqueos profundos sin desmantelar completamente la red de desagüe. Como su denominación lo sugiere, se trata de un cable flexible de extensión variable, provisto de una terminación en un extremo y un mecanismo de operación en el otro (tal como una manivela). Es sencillo de usar: se introduce por la boca del lavaplatos, lavamanos o desagüe concernido, avanzando hasta que la punta del cable impacte con la obstrucción en la cañería, para luego manipularlo hasta deshacerla o dividirla en fragmentos más pequeños.

Es preferible prevenir que resolver, aplicado también a bloqueos de tuberías

Más allá de las sugerencias previamente expresadas, es justo admitir que la mejor estrategia para evitar obstrucciones en las tuberías es actuar con cautela. La mezcla nociva de residuos de jabón, aceites y sobras de comida puede ser fatal para las cañerías. Por ello, es aconsejable prevenir que tales desechos terminen en el lavabo, haciendo uso de filtros, rejillas y otros artefactos que faciliten la separación de los sólidos del líquido.

De igual manera, los retretes se convierten en origen de tapones debido a la costumbre de desechar elementos como el papel higiénico, toallitas húmedas, tampones, vendas, hisopos y hasta pañales desechables. Es notorio que la acumulación de estos artículos es suficiente para colapsar cualquier infraestructura de drenaje. Tan significativa fue la problemática que en el año 2017 se dio a conocer la existencia del llamado ‘Titán de las Alcantarillas’: una acumulación de 900 toneladas de basura en diversas zonas metropolitanas, compuesto en su mayoría por aglomeraciones de toallitas.

Además, se aconseja la instalación de protectores en los desagües de duchas y bañeras. Estos dispositivos son efectivos para retener las hebras de cabello que se desprenden con regularidad durante la limpieza personal, el rasurado cotidiano y similares, evitando así que se junten con otros materiales y formen bloqueos que restrinjan el flujo del agua.

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